Collage de Kille

No había posteado en estos días pues estaba recuperándome de un palo que me dio el aire acondicionado del carro. Luego del suero y las vitaminas que hubo que ponerme cuando el “montro” del taller me salió con la cuenta de 11,800 pesos, ya estoy recuperado otra vez. Entonces hoy tengo un Collage para desahogarme por varias cosas que suceden en nuestra querida patria.

Lo primero es que ya estoy cansado de que la policía nacional, léase los agentes que se paran en la salida hacia la autopista 6 de noviembre desde la prolongación 27 de Febrero quieran cuadrar su día con uno. Ayer los susodichos por enésima ocasión me mandan a detener, y yo como es mi costumbre pues me detengo pero lo primero que le digo es que yo no tengo dinero y que conmigo no hay macuteo por que tengo desde una escoba, hasta un botiquín de la Cruz Roja en el carro. El a cargo muy creyéndose me pregunta que si a mi me molesta que la policía me pare, le digo que no y que lo que me molesta es que me paren cada 3 días y vean que yo ni vendo drogas, ni tengo contrabando, ni tampoco el carro es robado, pues entonces si ya saben y me conocen, para que me paran.

El encuentro se saldó con un “vaya tranquilo ciudadano”, y salí con un pique que no era yo, ahí decidí postear algo al respecto por que sencillamente… Me Cansé.

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La Secretaría de Turismo hizo un “negocio” arrendando por 99 años unos terrenos a una empresa extranjera. Esa empresa quiere instalar un centro de aguas termales o algo parecido.

Hasta aquí todo correcto, pero sucede que las tierras arrendadas pertenecían ya a unos campesinos de la reforma agraria, a los cuáles les van a dar la suma de US $ 350,000 por los terrenos que ocupan 2,300 tareas. La matemática aplicada, en este caso no cuadra, pues según los cálculos a los campesinos eso no le da para nada, máxime cuando eso durará 99 años en propiedad de la empresa que no se sabe cuál es.

Otra vez la clase gobernante se burla de los pobres y de los excluidos. Esos pobres campesinos no tuvieron oportunidad de negociar, ni de exigir nada por que sencillamente les dijeron, “esto es lo de uds.” y ya.

Ojalá algún día un gobierno le ponga las cosas claras a los que desde fuera quieren venir a quitarnos lo que es nuestro, y encima de eso a hacerse ricos a costa del sudor de un pueblo como el dominicano, trabajador y deseoso de salir adelante. En este caso, veo un capítulo más de la obra “vengan que yo se lo regalo”.

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Las cosas que le pasan a uno buscando Becas no están escritas. El viernes fui a la Secretaría de Educación Superior a llevar unos documentos que me faltaban, y cuando se los entrego a la Srta. Que nos asiste, ella toma solamente uno de los documentos y me devuelve el resto. “solamente necesitamos esto”, yo como me dicen que así está bien pues me regreso a mi casa, pues ese era el último día de mi semana de vacaciones.

Ayer me llaman del SITI y me dicen que mi beca peligra, que mi expediente en la Seescyt estaba incompleto, que pasara por allá. Hoy llego y paso por allá y la muchacha muy sonriente me dice que todo está en orden. Yo vuelvo y le pregunto y le digo que ayer me llamaron de la universidad y me dijeron que me faltaban documentos, a lo que ella me dice que a lo mejor fue un error.

Cuando voy por el parqueo, me llaman al celular, y me doy cuenta de que es de la misma seescyt, y oigo la voz de la chica que me dice, “mira…es el título que te falta”. La cuerda que cogí fue única, pero en un arranque de diplomacia, digna del señor Carreño y su manual de urbanidad le dije: “mi amor, pero tu misma me acabas de decir que todo estaba bien”, y en eso me devolví, título en mano para la oficina de la srta.

Por suerte todo se resolvió y ahora estoy esperando la famosa beca para la maestría. Vamos a ver que nuevas cosas traen desde la seescyt.